jueves, 21 de abril de 2016

PERÚ PAÍS DE COSTUMBRES LAXAS


Camino a otro 5 de abril


21 de abril de 2016


César Hildebrandt

En el Perú se reivindicó a Echenique, a Piérola y hasta a Prado 
a través de sus hijos. El Perú es país de costumbres laxas y 
memoria breve. Por eso es que García pudo regresar al poder 
y por eso es que Iglesias, el gran traidor, reposa en la 
cripta de los héroes de la guerra del Pacífico.

EI fujimorismo ha regresado para vengarse. Su primera cuenta 
pendiente, ya anunciada por una Cecilia Chacón henchida de 
soberbia, es con los jueces que condenaron al ladrón y asesino 
que sigue siendo protagonista patriarcal del movimiento. La 
lista vengadora es larga y no tememos estar en ella. Aquí los 
esperamos.

Desvinculada de la ética, la política puede llegar a ser
una maquinaria implacable de acumulación de poder. El 
fujimorismo no es un partido en sentido estricto porque si 
algo caracteriza a un partido político son las ideas. Y 
el fujimorismo es, básicamente, un proyecto dinástico que 
aspira a liberar a su líder preso, borrarle el prontuario 
“por vías legales” -tarea en la que tienen amplia experiencia- 
y dejar que los poderes fácticos hagan lo que saben hacer 
mientras ellos se dedican al negocio de administrar el 
Estado -talento que todos les reconocemos-.

El domingo pasado el Perú ha querido que en la segunda vuelta
la elección sea entre una organización criminal, más potente 
que nunca, y un conservador que ofrece lo mismo -el inmovilismo- 
aunque tenga el “mérito" de carecer de cuadros disciplinados
y propósitos firmes. Con el fujimorismo enfrentamos a una 
mafia monolítica. PPK es un ultraliberal que puede matizar 
planteamientos y que puede recordar, a veces, que la palabra 
decencia existe.

Durante años, con parte de la plata robada y con la ayuda 
del empresariado voraz que remató el Perú en los 90, 
el fujimorismo ha financiado la construcción de una maquinaria
electoral de nivel nacional. Lo ha hecho a su estilo: reclutando
con dádivas, ofreciendo futuras obras, apelando al recuerdo 
de aquella mano dura que los peruanos parecen siempre echar 
de menos. El fujimorismo cree ser original cuando, en realidad, 
es una reencarnación del odriismo. Es cierto que hay diferencias,
pero todas ellas favorecen a Odría.

Si Martín Adán viviera, diría que hemos vuelto a la normalidad. 
En efecto, la democracia menesterosa de la que nos jactamos -esa 
que convierte al Perú en el país más conservador del continente- 
le ha dado el control absoluto  del Congreso a la hija del hombre 
que clausuró esa institución, creó una miserable y apócrifa y 
produjo desde ella la Constitución-candado que nos ató para 
siempre a los intereses de la derecha más vulgar.

Un país urgido de cambios, dados los índices de desigualdad que 
padece, opta por la derecha que quiere menos regulaciones 
laborales y ambientales, más privatizaciones, más dominio sin 
culpa de los grandes intereses.

Un país que atraviesa una crisis institucional, de la que es
solo un ejemplo la vergonzosa actuación del Jurado Nacional 
de Elecciones, le el dominio parlamentario absoluto al 
partido cuya figura principal, Alberto Fujimori, destrozò 
las instituciones como nadie –ni siquiera el ejército de 
ocupación chileno- se había atrevido a hacer.

Un país que tiene un severo problema de inseguridad ciudadana
le da un cheque electoral en blanco a quienes aplaudieron la 
creación de grupos paramilitares de exterminio y no dijeron 
nada cuando salieron a la luz planes de asesinato en contra 
de algunos opositores, operaciones abortadas gracias al valor
de Mariella Barreto, la agente del SIE que terminó descuartizada
y cuya cabeza jamás pudo encontrarse. iKerosene ha vuelto!

Un país que necesita renovarse, diversificarse, extender el 
horizonte de sus metas económicas elige a dos rancios 
guardaespaldas del modelo que la prensa concentrada 
considera "sagrado”.

En resumen, unas elecciones abiertamente semidemocráticas, 
cuando no fraudulentas (obsérvese la actitud del JNE frente 
a las alianzas 24 horas antes del día de la votación), 
determinan que una fuerza que desprecia el consenso y 
ama la prepotencia se apodere del Congreso de un modo 
tal que ya no necesita, como en el 2000, comprar 
a ningún Beto Kouri.

En los próximos cinco años tendremos un régimen 
parlamentario en manos del fujimorismo. ¿le daremos 
también, redundantemente, el Ejecutivo? ¿Qué podrán 
hacer la inescrupulosa Keiko Fujimori y el sin bandera 
José Chlimper, azuzados por las Chacón y las 
Alcorta, con el Congreso y el Ejecutivo en sus manos?.

-Eso se llama gobernabilidad –diría Jorge Morelli, el 
ideólogo en la sombra del fujimorismo.

Yo le respondería:

-Eso, de suceder, se llamará empacho de poder, monopolio 
en manos turbias, chavismo de derecha. Eso sería el 5 
de abril sin tanques ni balazos ¡pero con los mismos 
resultados! 

FUENTE:
Publicada en la revista HILDEBRANDT EN SUS TRECE del 15-04-2016



jueves, 14 de abril de 2016

NO SE PUDO CONTRA PODERES FACTICOS, SUS MEDIOS Y TENEBROSA CAMPAÑA DEMONIZADORA

Perú: El país de las castas respira tranquilo

Alejandro Lira

Finalmente, a pesar de la enorme ilusión desatada, de la generosa y valiente movilización de miles de jóvenes peruanos contra los poderes fácticos, sus medios y su tenebrosa campaña demonizadora, no se pudo.
A Verónika Mendoza, joven cuzqueña de 35 años y candidata del Frente Amplio de izquierda en Perú ─después de haber estado respirándole en la nuca al segundo en liza, Pedro Pablo Kuczynsky─, le faltaron los votos necesarios para entrar en lo que hubiera sido una final electoral de infarto en Perú: entre Keiko Fujimori, representante del neoliberalismo salvaje, y Mendoza, encarnando la tenaz resistencia popular a un modelo que consagra la depredación del medio ambiente; que ha corrompido todas las instituciones habidas en Perú; que garantiza la evasión y elusión tributaria para las grandes corporaciones; que lleva la desigualdad económica y social a niveles sólo comparables con la democracia de castas hindú; y donde la precariedad en salud, educación, transporte y trabajo, haría que los peruanos tomasen el modelo actual de austeridad europea como una vida propia para ricos.
La descripción anterior no es ciertamente la narrativa que abunda en las radios, televisiones y prensa escrita de Perú. Un solo grupo empresarial posee más del 85% de los medios de comunicación peruanos y, por consiguiente, el trozo del pastel publicitario respectivo. Y, lo más importante, la capacidad de difundir un relato sobre la realidad del país que coincida con sus propios intereses.
La sola posibilidad de que la izquierda cuestione electoralmente el modelo económico, ─intacto desde el golpe de Estado dado por Fujimori en 1992─, les hizo saltar todas las alarmas. La visita que el embajador estadounidense, Brian A. Nichols, le hiciera a Verónika Mendoza nueve días antes de las elecciones (un auténtico cambio de tornas en un país donde todos los candidatos a la Presidencia realizan intensos lobbies para conseguir una discreta audiencia con el embajador de EEUU en Perú, para garantizarle su mejor voluntad y sumisión en caso de salir electos) fue tomada como una señal de pánico. En efecto, Mendoza consiguió evidenciar en las encuestas tal crecimiento durante las últimas tres semanas que prácticamente, por lógica estadística, su pase a la segunda vuelta estaba casi asegurado.
Fue entonces cuando el Poder puso en funcionamiento su maquinaria mediática. Por aire, mar y tierra los peruanos fueron bombardeados con información que revelaba los oscuros nexos entre el fallecido Hugo Chávez y Mendoza: cómo ella había anotado en una agenda ajena palabras que confirmaban la financiación de la izquierda peruana con dinero venezolano; que no sólo era chavista sino también terruca (peruanismo por terrorista) y que su lista para el Congreso estaba conformada por simpatizantes del terrorismo, cuando no por auténticos terroristas; o que su padre tenía intereses en la minería informal. No faltó en esta orgía de acusaciones la incursión de la Santa Madre Iglesia, que a través de uno de sus más connotados pastores convocó los horrores del infierno anunciando que los católicos incurrirían en grave pecado en caso de votar por ella.
Fueron tres semanas de espanto y pesadilla para las élites en Perú, un conglomerado de castas asociadas a las grandes corporaciones, que tienen a su disposición los fondos de pensiones de los trabajadores peruanos para tapar sus agujeros financieros, sus caídas en Bolsa y para jugar a inversionistas del primer mundo. Según sus propios instrumentos de auto referencia, consultan con sus espejos contables y éstos les dicen que su Perú, salvo los dos últimos años, es el país que más ha crecido en América Latina durante la última década. Que la pobreza se ha reducido y en el horizonte surge una clase media emergente como lo era su mercado de materias primas.
En sus delirios anunciaban que muy pronto su país iba a llegar al primer mundo. Y en honor a la verdad, es lo único cierto que han conseguido. Desde el mes pasado la geografía de las castas peruanas limita por el cielo con Europa. No precisan de visado Schengen, sólo ganas de pasear, hacer turismo y gastar en Europa todo lo que ya se han aburrido de comprar en Perú.
A pesar de estos indicadores que señalan a un país magnifico, existe un país invisible, un narco y sombrío Estado donde convive la pobreza con la violencia, donde prima la ley de la selva. En los últimos diez años, dos de cada tres peruanos han sido víctimas de un hecho delictivo; sólo uno de cada tres ha denunciado el crimen. A pesar de la propaganda constante contra el Gobierno venezolano, la prensa peruana ha escondido que el país sufre la tasa de criminalidad más alta de Suramérica.
Por otro lado, ser pobre y caer enfermo en Perú y llegar a un hospital público, es caer directamente en la antesala de la muerte; en sus laberintos habitan médicos y enfermeras, pero no existen medicinas. Es una imagen habitual ver a los familiares convertidos en mendigos que en una mano tienen la receta y en la otra la esperanza de que alguien les ayude a comprar la salvación de su pariente.
Tenemos los peores resultados continentales en educación y el último proceso electoral ha sido una auténtica pasarela de la corrupción política. Salvo una minoría de candidatos, los propios aspirantes a la Presidencia en vez de currículo contaban con un abultado historial judicial, donde podía encontrarse de todo: asesinato, blanqueo de dinero, malkversación de fondos públicos, plagio, violación, perjurio… En fin, todo un paseo por los capítulos del Código Penal.
Nadie parece haberse percatado de que el país con mayor índice de desigualdad económica del continente, tiene también el índice de mayor inseguridad ciudadana. Como si los excluidos del sistema, a su manera, llevaran adelante una redistribución de la riqueza, que ciertamente la entidad recaudadora peruana no tiene ninguna intención de hacer.
Conocidos los resultados de las elecciones, los voceros del modelo económico están exultantes: la derecha entre los dos finalistas con mayoría en el Congreso. La presencia de una minoritaria pero respetable representación de izquierda cumplirá con creces la función de legitimar su democracia.
Uno de los más insignes representantes de la Casta de América, el peruano Vargas Llosa, quien pedía para España un gobierno de la Gran Coalición entre el PSOE y PP, puede estar muy contento y tranquilo con los resultados de los comicios. La hija de quien lo venciera en las elecciones presidenciales de 1990, Alberto Fujimori, quien además llevó a la práctica el shock neoliberal propuesto por el escritor en su campaña, va primera. Segundo va un conocido suyo, Pablo Kuczynsky, ─la versión peruana del Gonzalo Sánches de Lozada boliviano─ banquero, lobista y exministro de economía, a quien hace poco los ‘papeles de Panamá’ han encontrado una carta de recomendación oficial suya (en calidad de ministro) para que un ex director del Banco Central de Reserva peruano pudiese registrar una compañía en el paraíso financiero panameño.
Dada la composición del nuevo Congreso, el resultado de la segunda vuelta electoral es irrelevante, la vigencia del statu quo está garantizada. En la mañana del lunes, después de la resaca victoriosa, los portavoces de la derecha se preguntaban: ¿podemos hacer algo en aquellas regiones donde la izquierda ha tenido presencia? Con obsequioso beneplácito anuncian que el próximo Gobierno debería distribuir gratuitamente pastillas con hierro para combatir la anemia y desnutrición infantil. Según ellos, la dieta en esas zonas está muy mal equilibrada. Salud, pues, para su Perú, tan generosos han quedado.

 Fuente:

http://www.leerydifundir.com/2016/04/peru-pais-las-castas-respira-tranquilo/

miércoles, 6 de abril de 2016

PERÚ: ÚNICA ALTERNATIVA CON VERONIKA MENDOZA






PERUANOS Y PERUANAS CON MEMORIA, 
EN PERÚ Y TODO EL MUNDO GRITARON CONTRA KEIKO FUJIMORI

CONCENTRAR LOS VOTOS EN EL FRENTE AMPLIO(lograr obtener una buena votación presidencial y una buena bancada en el Congreso)



A 24 años del autogolpe del dictador Alberto Fujimori, los peruanos protestaron contra la candidatura presidencial de su hija, Keiko Fujimori.
Las protestas contra la abanderada de Fuerza Popular (FP) Keiko Fujimori se intensificaron este martes en las principales calles y avenidas de Lima (capital de Perú) y de todo el mundo, de cara a las elecciones presidenciales previstas para este 10 de abril.
Movimientos sociales, defensores de derechos humanos, estudiantes y líderes campesinos se sumaron a las manifestaciones contra la candidatura de la hija de un dictador. Con pancartas y mensajes de repudió los peruanos dejaron en claro su rechazo a la política de 40 años.

Miles ganaron las calles en Perú para rechazar a Keiko Fujimori



Los residentes peruanos en Finlandia también se reunieron para protestar contra Keiko Fujimori. Foto: Roxana Crisologo

Helsinki fue la ciudad donde los peruanos residentes en Finlandia se reunieron para protestar contra Keiko Fujimori. Foto: Roxana Crisologo

La ciudad de Sidney también fue escenario de un plantón realizado por los residentes peruanos en esas ciudad.

Junto a la Ópera de Sidney peruanos marcharon mostrando su rechazo a la candidatura de Keiko Fujimori.
Otra país en el que los peruanos residentes realizaron marchas a fue Suecia.
RAZONES PARA VOTAR POR  VERÓNIKA MENDOZA

He perdido la ilusión de votar porque todos los presidentes elegidos han traicionado al país, además de ser ineptos, corruptos y genuflexos ante el capitalismo criollo. Por lo tanto votaré por “descarte”. Es decir, descartando a los que seguramente serían una nueva desgracia para el Perú.


A la cabeza del “descarte” está Fujimori. El disfraz de Keiko no engaña a nadie. Digo mal: engaña al 30% de los peruanos. ¿En qué piensan mis compatriotas? ¡Qué horror! El 30% o más votará por ese núcleo duro de corrupción, mangoneo, desfachatez y desprecio a los DDHH. ¿Por qué tiene tanto éxito Keiko? Vaya usted a saber. Para mí es un misterio insondable. Felizmente creo que el 30% de votos es su límite. Estoy seguro de que en la segunda vuelta el otro 70%  votará contra Fujimori y su camarilla. Así le pasó a Vargas Llosa cuando salió el más votado en la primera vuelta pero no sacó ni un solo voto más en la segunda.


Seguimos con el “descarte”. Pedro Pablo Kuscynsky, PPK, tampoco da la menor confianza. Este pájaro de alto vuelo es un traficante financiero que por comisiones ilegales está dispuesto vender a precio de ganga todo lo que pueda del Perú: empresas estales, minería, energía, tierras. PPK es el tipo de rapaces financieros con experiencia que pululan por los cielos de América viendo donde pueden aprovecharse de incautas presas. De su nacionalidad poco sabemos, de los paraísos fiscales en los que tiene fondos a nombre de testaferros menos aún.


De Toledo y Alán García no es necesario justificar sus “descartes” porque están en la memoria reciente de los peruanos la corrupción y los escándalos de sus gobiernos y el enriquecimiento ilícito que hicieron ellos mismos y sus secuaces a ojos vistas.


De los 10 candidatos iniciales quedan 6. Descartamos a Ántero Flores Aráoz, buena persona, quizá hasta honesto, pero en sus últimos años dio unos bandazos desconcertantes: pasó del Partido Demócrata Cristiano, al PP, y acabó siendo ministro de Alán García. Su lema: “Partido Político Orden”, me hace recordar los partidos fascistas.

Descartamos a Olivera, que ha tenido la desfachatez de presentarse de nuevo con su símbolo de la escoba, cuando manchado por la corrupción él mismo tuvo que salir del país. Luego regresó y fue el ministro más breve de la historia: juró en Palacio como ministro de RREE y cuando llegó a su despacho fue forzado a dimitir. Olivera no barre ni en su casa.

Nos quedan 4.  Dos de ellos muy interesantes por lo que son y lo que representan. Daniel Walter Escobar (HILARIO) es un compatriota shipibo conibo de nuestra selva que habla varios idiomas nativos y que a base de estudios y esfuerzos se doctoró en Antropología en la universidad de Stanford, Desgraciadamente su campaña no ha abarcado ciudades importantes donde es desconocido. No es desconocido por los peruanos Gregorio Santos Guerrero, líder de Cajamarca cuya oposición al proyecto minero Conga pudo paralizar un ataque mortal a la ecología de esa región. Luego lo metieron preso por cohecho y corrupción. Muy raro asunto, raro y confuso. El resultado es que desde la cárcel no pudo preparar una campaña presidencial por lo cual lo descartamos.


Nos quedan 2. Alfredo Barrenechea ha recibido ataques de El Comercio de los que no ha sabido o podido defenderse. No es fácil luchar contra el “Paquidermo de la Rifa”, más si éste aplasta al que no sea PPK o Keiko. Barrenechea se atrevió a criticar el modelo económico que viene manteniendo el Perú desde Fujimori, y eso puso furibundo al Paquidermo que lo envolvió con su trompa y lo hizo caer en picado en las encuestas.


Nos queda pues Veronika Mendoza que gracias a sus buenas dotes políticas, preparación y capacidad ha podido esquivar con poco daño todos los ataques del Paquidermo. A Veronika la acusan de todo, y alguna gente lo cree. Que si es comunista, que hace lavado de dinero, que si escribió o no en la libreta de Nadine Heredia, que si fue a Venezuela. El caso es que esta joven cusqueña, con estudios en el extranjero, que habla quechua correctamente, además de francés, inglés, y un impecable castellano, es una convencida social-demócrata. La social democracia tiene muchos partidos importantes en Europa, y ahora con Sanders en EEUU ha dejado de ser tabú hablar de socialismo en el mundo, mientras en nuestro ignorante Perú cuando se oye hablar de socialismo muchos creen ver a Stalin o a Lenin, y no saben que partidos socialistas han gobernado en Escandinavia desde hace décadas, y que socialista es el gobierno de Francia, Portugal, Italia y el que cogobierna en Alemania. Por favor, lean un poco sobre socialismo, por ejemplo a Tony Judt.


En resumen: por descarte votaré por Veronika Mendoza. No hay una candidatura mejor.  Si Veronika sale segunda en la primera vuelta ganará a Keiko en la segunda, ya que él que no votó por Keiko en la primera es porque repudia lo que ella es y representa.


El cambio que el Perú necesita
Ante la probable elección de Verónika Mendoza como Presidenta de la República

La crisis y desgaste del modelo económico neoliberal, el elevado antivoto que sufren los candidatos que lo defienden y las movilizaciones No a Keiko y contra las resoluciones fraudulentas del JNE para beneficiar a Fujimori, García y PPK, han radicalizado a un sector importante del electorado nacional abriéndose así la posibilidad de que, contra todo pronóstico previo, Verónika Mendoza y el Frente Amplio lleguen a ser elegidos el nuevo gobierno del Perú para el período 2016-2021.

Quienes compartimos las expectativas de millones de peruanas y peruanos por el cambio de modelo económico y de Constitución, hemos decidido participar de esta experiencia, conscientes de que un hipotético gobierno de Mendoza traería nuevos desafíos que todas las fuerzas comprometidas con el cambio debemos enfrentar unidos.

No podemos evadir esta responsabilidad tomando de pretexto diferencias programáticas e ideológicas que puedan existir y que nosotros, como corriente ecologista popular, sostenemos con la opción izquierdista del Frente Amplio. De allí que nuestra primera decisión es llamar al voto crítico por la fórmula presidencial que preside Verónika Mendoza, con la exclusiva finalidad de sumar para que, desde ahora, dicha candidata logre pasar a la segunda vuelta derrotando al lobbista orgánico de las transnacionales PPK. Y luego, unir todas las fuerzas posibles para evitar el retorno de la dictadura fujimontesinista.

Por otra parte, consideramos que el panorama de un próximo Congreso controlado por fujimoristas, apristas y ppkausas, lo peor de la derecha neoliberal, plantea enormes peligros para un hipotético gobierno de Verónika Mendoza. La CONFIEP, la Sociedad de Minería y de Hidrocarburos, la Sociedad Nacional de Pesquería y los consorcios y grandes empresas harán lo suyo, sin duda; reforzados por campañas de desprestigio de grupos mediáticos como El Comercio y RPP, y de la embajada estadounidense y de otros países interesados en el saqueo del territorio, para cortar las alas al más tibio intento de cambio.

Frente a esto, hay que ser claros: las mayorías populares esperan propuestas de gobierno que alimenten sus esperanzas de salir de la situación paupérrima en que se encuentran, agobiadas como están por la globalización vigente que se traduce en la presencia invasora de las transnacionales, los recortes presupuestales, la violación de sus derechos, la corrupción y la violencia delincuencial. Una decepción más como la de Ollanta Humala entregaría el país al fujimontesinismo, ya bastante fortalecido y que está al acecho.

La casi nula presencia de fuerzas sociales luchadoras en el Frente Amplio y la situación no calculada de tener que disputar el balotaje con el fujimorismo, complican el panorama, al no tener Verónika Mendoza y el Frente Amplio la suficiente fuerza interna para resistir los embates neoliberales y no plantearse claramente como movimiento alternativo a las arbitrariedades de la actual globalización, pero, sobre todo, no contar con un movimiento social nacional organizado que defienda los cambios.

En el actor social está la clave del éxito o fracaso, para no caer en un proceso de rendición que sería mucho peor que el de Humala. De allí que el eje de la política de un probable gobierno de Verónika Mendoza tiene que ser organizar e impulsar ese gran movimiento social nacional de respaldo a los cambios de fondo que el país requiere.

Para convocar a ese sujeto social es clave que el eventual gobierno de Mendoza empiece por tomar un conjunto de primeras medidas que atiendan las urgencias del país y de los 30 millones de almas que conforman su población:
  • Dar solución a todos los conflictos por motivos ambientales y laborales, respetando la  decisión y derechos de los pueblos y trabajadores afectados.
  • Restituir los derechos conculcados y ampliarlos a todos los sectores del pueblo, hoy discriminados.
  • Eliminar las services y todo el sistema de flexibilización laboral que facilita la inestabilidad, los despidos arbitrarios y los bajos sueldos.
  • Crear la seguridad social universal con jubilación solidaria y desactivar las AFP.
  • Implementar programas de ayuda social ligados a proyectos productivos sostenibles en el tiempo.
  • Dotar de presupuestos suficientes a educación, salud, vivienda, luz, agua potable y transporte, e impulsar reformas integrales en todos estos sectores. Garantizar gratuidad de educación y salud públicas de calidad como derecho constitucional y acceso universal.
  • Sentar las bases para un cambio de modelo productivo, poniendo fin a la aprobación indiscriminada de concesiones extractivas al solo pedido de los grandes inversores, para que los proyectos dependan de planes locales, regionales y de un plan nacional de desarrollo, del ordenamiento territorial, de la consulta previa y de las potencialidades de las familias campesinas, artesanales y de micro empresarios que generan millones de empleos permanentes.
  • Garantizar la soberanía alimentaria de nuestro país privilegiando el desarrollo de la pequeña agricultura familiar y ecológica, dictando para ello medidas urgentes que, por lo menos: (a) permitan asignarles recursos e infraestructura suficientes; (b) brinden acceso a mercados internos y externos en condiciones justas; (c) eviten la siembra de monocultivos y el acceso de transgénicos y agrotóxicos; (d) impidan el acaparamiento y concentración de tierras agrícolas; (e) garanticen un acceso justo y equitativo al agua.
  • Elaborar los presupuestos nacionales con un sistema justo de tributos, basado en el impuesto directo (renta), en donde paguen más los que ganan más. 
  • Iniciar la recuperación para el Estado de sectores económicos estratégicos que ayuden a fortalecer la caja fiscal con recursos propios y no aumentar la deuda con la banca usurera.
  • Atacar el problema de la inseguridad con un plan integral que contemple dos líneas de acción: 
- Un sistema de seguridad ciudadana y rural, en estrecha coordinación con los gobiernos locales, la policía nacional y las organizaciones comunales y vecinales. 
- Un plan de fomento del deporte, cultura, capacitación técnica y apoyo en salud mental para jóvenes y adultos.
  • Iniciar el combate franco a la corrupción empezando por judicializar los casos que comprometen a ex gobernantes y gobernantes, como los “narcoindultos”, Ecoteva, estudios de Keiko y Kenji, las agendas de Nadine y Lava Jato-Odebrecht.
  • Promover desde el inicio un proceso generalizado de fortalecimiento de medios de difusión populares en todo el territorio, para combatir la arremetida de infamias, calumnias y medias verdades que iniciaría la derecha ante un gobierno del Frente Amplio. 
  • Promover la movilización popular organizada y consciente en todo el territorio y de todos los estamentos posibles para defender los avances democratizadores que inicie un gobierno del Frente Amplio, respetando la autonomía de las organizaciones sociales.
  • Iniciar, desde el primer momento, los esfuerzos para confrontar las consecuencias del calentamiento global y cambio climático que es tema urgente e impostergable, sobre todo por las consecuencias desastrosas que sufren las poblaciones que viven en la selva, los andes y en zonas de alto riesgo de las ciudades. 

  • Para ello, se requiere aplicar un plan nacional de prevención y mitigación, con inversiones en investigación científica por regiones, acopio de semillas, alimentos, ropa y medicinas, reparación de caminos, etc., garantizando los presupuestos necesarios y movilizando fuerzas de ayuda todo el año.
  • Una medida decisiva para evitar consecuencias irreparables en nuestra Amazonía, sobre todo en el contexto actual de cambio climático, es declararla libre de explotación petrolera y de toda actividad económica que ponga en riesgo su delicado equilibrio ecológico y sea una amenaza para la supervivencia y desarrollo de los pueblos amazónicos.
  • Otra medida urgente es el cambio constitucional a través de una Asamblea Constituyente que garantice la presencia de los pueblos quechua, aimara y de todos los pueblos amazónicos, así como encaminarse a la conformación de un Estado Plurinacional que deje atrás la marginación histórica de estos pueblos.
  • El cambio constitucional también es necesario para restituir la soberanía nacional sobre los recursos naturales y recuperar al Estado como promotor del desarrollo y defensor de los pueblos y ciudadanos. Y nos deberá llevar a la denuncia del TLC con los Estados Unidos y al rechazo del TTP y de todo otro tratado internacional que amenace nuestra autonomía como Estado y país.
  • Iniciar, desde el primero momento, el impulso decidido hacia un proceso de descentralización efectiva, que conlleve al desarrollo de procesos locales fortalecidos económica y socialmente, y que también contribuya a la migración en reversa, que permita una mejor distribución de la población en el territorio y, en consecuencia, apoye en el uso sostenible de los recursos.
  • Reconocer los valiosos aportes de nuestros pueblos y comunidades indígenas andino-amazónicas a la construcción de nuestra identidad nacional, a la economía nacional, a la soberanía alimentaria y a la lucha contra el cambio climático, dictando desde un inicio medidas y políticas que garanticen el pleno goce y ejercicio de sus derechos colectivos, especialmente el derecho a la autodeterminación y al territorio.
Este conjunto de acciones de gobierno permitirían empezar a tejer alianzas con el amplio movimiento social que viene resistiendo al modelo neoliberal que solo ha traído mayor riqueza para las transnacionales y un sector privilegiado del país, a costa de una larga noche de privaciones para los trabajadores y de pérdida de fuentes de vida en las regiones invadidas por proyectos extractivos y de agro exportación, que crean bolsones de miseria en costa, sierra y selva.

De este modo, desde su eventual gobierno, Verónika Mendoza y el Frente Amplio podrán organizar e impulsar ese movimiento social del cambio que hace falta y que, insistimos, será la fuerza decisiva para resistir los embates neoliberales, impedir su resurgimiento político e incluso derrotar alguna aventura golpista de sectores militares corruptos.

Apostamos a este plan político para no solo garantizar el éxito de un probable gobierno de cambio, sino, sobre todo, abrir el camino a la continuidad de dicho proceso con los relevos democráticos necesarios en la conducción del país.

Por lo que, desde ahora, nos ponemos en campaña no solo para lograr el triunfo electoral sino para apoyar y promover, desde la ubicación que nos toque, el logro de los cambios mejores para avanzar en el proceso de revolución desde la tierra, para la tierra y en beneficio de todos los que somos parte de ella.

http://candela3.blogspot.pe/2016/04/peru-concentrar-los-votos-en-el-frente.html